A continuación, los 5 puntos más importantes que se deben tener en cuenta después de una cirugía robótica de mínima invasión.
1.-Durante la cirugía usted tendrá un catéter o sonda Foley que facilitará el drenaje de orina almacenada en la vejiga, esta sonda es un tubo flexible y suave de látex, que tiene la función de vaciar la orina de la vejiga, la cual se almacenará en una bolsa colocada al lado de su cama. Al ser egresado del hospital puede llevarse dicha bolsa o colocarse una mas práctica y discreta que se fija a su pierna y puede llevarse por debajo de la ropa. La sonda normalmente es retirada una semana después del procedimiento, al acudir a su primera cita de revisión posterior a la cirugía.
Para algunos pacientes la sonda ocasiona leves molestias, para otros no, independientemente del escenario, la sonda no priva a los pacientes de realizar caminatas y paseos al exterior ya que la sonda se encuentra oculta por debajo de la ropa. Durante su estancia en el hospital, el servicio de enfermería se encargará de explicar cuidadosamente el manejo en casa de la sonda y el reservorio para la orina.
2.-Durante el procedimiento quirúrgico se coloca un drenaje hacia la cavidad abdominal, consta de un tubo suave y flexible de plástico llamado Jackson Pratt o Blake y un reservorio para el exceso de fluidos localizados en el área quirúrgica. Normalmente es retirado previo a su egreso del hospital, pero en algunos casos cuando la cantidad de secreciones es mayor de lo habitual, es necesario mantenerlo en su lugar al ser dado de alta. Dependiendo de la cantidad diaria cuantificada puede ser retirado junto con la sonda Foley para la orina durante la primera evaluación postquirúrgica en una semana o mantenerse durante algunos días mas. En estos casos el paciente es instruido cuidadosamente para el manejo del reservorio y que el gasto o cantidad de secreción sea cuantificado todos los días. Previo a su retiro se realiza un estudio de Rayos X llamado Cistograma, el cual nos informará si es momento adecuado para retirarlo.
3.-La dieta comienza el mismo día del procedimiento quirúrgico con líquidos como te, jugo, gelatina y agua. Si es tolerada de buena manera la dieta es se progresada hasta llegar a la dieta normal, tratando de evitar aquellos alimentos que provoquen estreñimiento o constipación.
4.- En conjunto con el servicio de enfermería se monitorea la escala del dolor del paciente, administrando medicamentos en los casos necesarios para mantener una estancia intrahospitalaria mas cómoda.
5.-Antes de abandonar el hospital, se te otorgarán medicamentos para el dolor, estreñimiento y antibióticos.
Te compartimos un video para que puedas darte una mejor idea de lo que te acabamos de mencionar.